Reivindico vivir aquí, en esto que se le llama el ahora.
En los pasos que conducen nuestros pies. En la senda que nos lleva a algún lugar. En disfrutar de ese camino, sin la mirada perdida en un verbo que no vuelve. Y en mirar, sentir y poner la vista sobre todas esas cosas que forman el concepto de un presente.
Y si, porque no, porque ahora me despierto más feliz de lo que he sido nunca. Porque ahora me invade un cosquilleo y emoción permanente por cada cosa que contemplo, por cada sensación que anida en mi cuerpo.
Me estremezco, y tengo esas ganas inmensas de comerme el mundo, degustarlo lentamente.
Porque me siento plena, y me encanta el camino por el que me llevan mis pies.
Y así de rápido lo digo. Me siento a mirar como el sol se posa tras las montañas, y me siento a escuchar la lluvia caer sobre el cristal. Y observo, y tal como observo siento.
Menos pasado y más presente, porfavor.
Ainara.